martes, 16 de junio de 2009

Poesía y sentimiento humano: El evento de la lectura poética

Desde el tierno beso que anhela al amado, a la loca pasión que aprisiona sin límites, desde la verdad del amor, a la amplitud de posibilidades infinitas que proporciona la pasión; desde la cordura del amor sereno, a la pérdida de la razón durante el éxtasis amatorio... un poema es capaz de realizar un recorrido frenético por los núcleos más elementales de la amatoria humana.
Las palabras que nacen del amante hablan desde el polo activo de la relación amorosa entre dos personas, exigiendo una reciprocidad cuando menos justa, ante lo que el amante es capaz de ofrecer.
Así el juego creador que se despliega bellamente en este ámbito, nos enseña intuitivamente los caminos de la estructura sentimental fundamental del ser humano.
La fuerza primordial del poema reside germinalmente en la actividad constante desde la que habla, una actividad que al mismo tiempo se muestra respetuosa y paciente, a la espera de que la pasión expresada le sea devuelta. Se empieza con un sentimiento y se termina con una apelación, y entre medio múltiples caricias, un fuego que no cesa, y la exigencia de la locura... y más al medio aún, entre medio, todo un acto amoroso que se interna apasionadamente en el deseo... deseo de ser correspondido en la locura serena del amor.
Exige tanto la lectura profunda y la recepción auténtica de un poema -desde luego no menos de lo que aporta-, que incluso exige al lector que sienta los indicios del cosquilleo que impulsó al autor a moldear tales versos, y al buen lector, seguro que esta circunstancia no se le escapa.


19 comentarios:

MichO ツ dijo...

Bonito Post...
te leeré siempre..
saludos!

febade dijo...

Como amante de la poesía he de decir que estoy totalmente de acuerdo en tu exposición.


La poesía, en su concepción, surge como una emoción, un sentimiento codificado. El poeta debe exfoliar, mediante las palabras, el camino que lleva al lector a la comprensión.

La poesía es un gesto, una actitud que se revela en la intimidad.
Este gesto acoge en su seno un sin fin de tragedias (me refiero al ser) que son desveladas por el poeta.

Un saludo

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Hola Michito, encantado y sé bienvenida. Gracias por pasear por mis narraciones, y espero que efectivamente te quedes por aquí. Un saludo!

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Febade, veo que andamos por un mismo sendero en nuestra comprensión de la poesía. Nuevamente, muy buena tu aportación. Un saludo!

Conchi Guirao dijo...

Que bonito el amor, y que bonito cuando se expresa mediante la poesia..Es un mundo de fantasía fascinante.

Bonita entrada.

Un besito desde Murcia (España)

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Conchi, qué duda cabe que la auténtica poesía desborda belleza en cada palabra, y que el amor expresado poéticamente es una de las cumbre creadoras más altas, a las que el ser humano ha podido llegar.
Un beso Conchi, y gracias por la visita.

Natalia Astuácas dijo...

Hola Rubén.
Me sonrío al leer tu post, me sonrío porque me parece un texto motivado por sensaciones, amor, sensibilidad y ternura pero encerrado en un conjunto de letras de cátedra :)

Te dejo un fuerte abrazo, cuidate mucho, beso.

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Natalia, me agrada muchísimo que atribuyas sentimiento y saber a mis palabras... gracias! Un beso amiga!

mara-mara dijo...

Desde luego..., recoger con las pupilas tu poesía es llenarme de aire y de vida...
Infinitas gracias por preguntar por mi persona; me disculpo ante ti por mi ausencia y me escuso con la tristeza que envuelve mi alma, pues no atravieso buenos tiempos y estoy a la espera de verlos llegar en cualquier momento.
Estoy en pausa, eso es todo.
Un beso... para ti amigo Ruben.

Anónimo dijo...

este texto tuyo es lo MAS, comprender a quien escribe versos y lo que quiere decir en ellos es a veces complicado, pero tú lo has relatado de una manera increíble, eres un alma sensible....alucino con tu manera de escribir!!!!
un beso

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Mara-Mara, me alegra mucho leerte por aquí. Gracias por tus bondadosas palabras. No hay que disculparse por nada, espero que las cosas vayan mejorando. Un beso también para ti, amiga. Ánimo!!

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Vangelisa, gracias por tus palabras... no sé si escribiré tan bien como dices, esa es una valoración que a mí no me corresponde, pero en cualquier caso es agradable oír halagos como los tuyos... no lo voy a negar. Un beso.

Inés dijo...

gracias Ruben, me ha gustado mucho
no todo el mundo sabe leer poesía, tú demuestras tener la sensibilidad que precisa su lectura.

No todo la poesía es capaz de provocar el cosquilleo que mencioneas que no es más que transmitir el extasis, el amor, la pasión, la fuerza y el sentimiento impreso en los versos, por eso cuando esto ocurre el milagro se produce entre el poeta, el poema y el destinatario o receptor universal, entonces la obra está viva y germina en el lector.

un abrazo y un beso

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Hola Inés, gracias a ti por tu tiempo y tus palabras. Efectivamente, estoy contigo en que la poesía es algo distinto, no todo el mundo aprecia sus matices. La distinción que apuntas entre poeta, poema y lector es fundamental para atender a la esencia de la poesía; y tú la comprendes desde la óptica del creador, lo cual te proporciona una luminosidad especial en este tema. Un beso.

ScrinS dijo...

Experto en Heidegger guauu, adoro a ese filósofo.

Creo recordar que él decía que la poesía suplía la negligencia de la metafísica.

Magnífica entrada.

Un saludo

Rubén Muñoz Martínez dijo...

ScrinS, bienvenida a estas narraciones. Heidegger es uno de los grandes pensadores del siglo XX.
Exactamente Heidegger no pensaba que la poesía sustituía la negligencia de la metafísica. Más bien pensaba que la metafísica, por su propia estructura interna, no podía pensar la cuestión del ser, mientras que sin embargo, la poesía, de alguna manera sí podía... o al menos eso es lo que parece que Heidegger nos quiere indicar, aunque el tema es muy complejo de tratar.
Un saludo.

Paloma Corrales dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Paloma Corrales dijo...

Ya lo he dicho alguna vez, pero lo repetiré porque lo creo a pies juntillas:

La poesía es un compromiso de sensibilidad y belleza tanto para el que escribe como para el que lee.

Tengo la impresión de que tú también lo crees firmemente. Me encantó.

Silencio agradecido.

(Ahora sin erratas... espero)

Rubén Muñoz Martínez dijo...

Paloma, efectivamente creo lo que bien apuntas, y además le añado la experiencia personal a la belleza y sensibilidad propias de la poesía.

Me alegro de que hayas llegado hasta aquí.

Gracias a ti.